Jamie Oliver y el hidróxido de amonio

Ya que una entrada no me llega para explicaros la situación del mercado alimentario como me gustaría, he pensado que mejor os voy soltando conceptos poco a poco, confiando en que estén lo suficientemente relacionados como para que os hagáis una idea de la coyuntura.

Para empezar, un ejemplo de abaratamiento de costes: seguro que habéis oído hablar del chef Jamie Oliver  y su demanda contra McDonalds, pero nunca está de más recordar el conflicto:

Resulta que el chef Oliver descubrió que la carne de McDonalds se lava con hidróxido de amonio, que viene a ser amoníaco diluído en agua. No es una sustancia nociva en sí misma, de hecho su uso en el procesado de alimentos está autorizado desde 1974, pero el tema es para qué se usa; existe una bacteria conocida como e-coli que vive por lo general en el intestino de los animales (en teoría estamos hablando de vacas) y algunos de los tipos de e-coli sí son peligrosos para el consumo humano.

¿Cómo llega una bacteria del intestino de una vaca a la boca de una persona? Pues  se dice que «por mala manipulación» de la carne, lo que quiere decir que en algún punto del procesado la bacteria ha pasado del intestino de la vaca a la carne. O lo que es lo mismo, el contenido del intestino de la vaca ha estado en contacto con la carne.

O lo que es lo mismo, cierta clase de carne picada contiene trazas de heces de vaca, y el lavado con hidróxido de amonio esteriliza esas deposiciones. Excrementos. Caquita.

¿Con qué tipo de carne ocurre esto? Con la de peor calidad, los restos de los restos, con la carne de mierda.

Resulta más barato no poner cuidado en el eviscerado de la carne y luego tratarla con hidróxido de amonio por ejemplo, que en tratar de obtener una carne apta para el consumo humano desde el primer momento.

En esta entrada he tratado de explicar mediante un ejemplo que el consumidor ignora en muchos casos de dónde vienen los alimentos que está comiendo. En próximas entradas os hablaré de la integración vertical y horizontal, el poder de negociación y los costes ocultos, por ejemplo.

Comercial-pro-carne-700x393 Sir Sepioso